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Bob Dylan. Modern Times

A ver quien es el guapo que se pone a discutir un disco de Bob Dylan a estas alturas. Tampoco está muy de moda alabar un disco de Dylan en el s.XXI. ¿Qué os esperáis de este disco? Pues eso váis a tener. No le pidáis a vuestro abuelo que se connecte a internet. Dylan sigue haciendo lo que él entiende por hacer música, y en lo que él hace es y será el mejor. Modern Times habla del mundo actual -y de Alicia Keys- desde la perspectiva de la música de los 60 y 70. Buen ejemplo es el video de When the deal goes down con Scarlett Johansson. Si os gusta Dylan, compraros este disco y darle un placer a vuestros oídos contagiados de hypes post-punkarras que no irán a ninguna parte. Si no os gusta, compradlo y quemadlo. Suena a disco atemporal, a una nostalgia aceptada y, sin dejar de ser pesimista (como todas las nostalgias), alegre. Suena al Dylan de los 70, al folk vísteme despacio que tengo prisa que ha hecho toda la vida. Darle una oportunidad. No va a ser el mejor disco del año, ni el mejor disco de Dylan, ni el mejor de nada, pero aún así es un caramelo que se deshace en boca de otoño con mañanas soleadas y tardes sombrías.



Yo La Tengo. I Am Not Afraid Of You And I Will Beat Your Ass

¿Quien iba a esperar a estas alturas un discazo de Yo La Tengo? Los de Hoboken son capaces de todo. I am not afraid of you... suena como un grandes éxitos de Yo La Tengo. Entiendáseme con grandes éxitos tomar lo mejor del sonido de cada una de sus épocas y darles una vuelta de tuerca para entregar un nuevo disco lleno de energía -véase la encargada de abrir: Pass me the hatchet...- y profundidad. Casi 80 minutos de música con altibajos enérgeticos pero con uniforme intensidad que permite al trío enseñar todas sus buenas cartas. Lo que asusta es que, como el buen vino, los discos de Yo La Tengo ganan con el tiempo. Éste no puede ganar mucho más, pero aún así se avecina una maduración constante y sin perder fuerza. Esto lo situa como uno de sus grandes discos. Bajo mi punto de vista, esta por encima de los últimos. Pero decir esto es tan subjetivo como opinar sobre la ciudad más bonita del mundo. No hay más que esperar hasta noviembre para escuchar como defienden el disco en directo; hasta entonces a tomárselo cada ocho horas y si aumenta la inflamación, dosis doble. No nos podremos curar nunca.